domingo, 13 de marzo de 2011

¿A quien beneficia la caridad?

Como todos sabemos en la acualidad, y desde hace ya mucho tiempo, hay la necesidad de paliar las desigualdades existentes entre el llamado primer mundo y el tercero, pues mientras en uno a obesidad es uno de los mayores problemas en el otro la gente muere de hambre, y desde luego, esta no es la única diferencia, tan solo es uno de los muchos ejemplos que se podrían citar respecto de este tema.

Hasta hace poco tiempo ese papel de ayuda al desarrollo de los más desfavorecidos correspondía al estado, sin embargo, poco a poco, la empresa privada se ha ido abriendo paso en la realización de esta función. El problema que se presenta es: ¿Con quién está la lealtad de estas empresas? ¿con los pueblos a los que explotan o con sus accionistas? ¿Cúal será la duración de estas ayudas?...

Está claro que el objetivo de una epresa privada es la obtención de beneficios. ¿Es esa meta tan ambiciosa hasta el punto invertir cierto capital en acciones sociales para sobornar moralmente a los consumidores y conseguir de esta forma  aumentar sus beneficios? Está claro que hasta cierto punto esto así puesto que muchas veces las empresas hacen referencia a estas ayudas en sus spots publicitarios. En el siguiente vídeo podeis ver un ejemplo de cómo la empresa de Aquarius hace referencia a esa imagen social incluyendo en su anuncio a personas habitualmente marginadas, personas con enfermedades mentales y lo cierto es que el anuncio fue un éxito y se convirtió en una de las más aceptadas por el público español.



Además hay que tener en cuenta que muchas veces las empresas destrozan los ecosistemas locales pero crean universidades u otros centros que ayudan al desenvolvimiento de la región. A mí me parece contradicctoria esta actuación pues alguién realmente preocupado ppor la situación de una sociedad no destruiría el lugar donde vive.

En cuanto a la durabilidad de estas ayudas parece claro que en el momento en que la empresa deje de obtener beneficios en la zona se marchará a otro lugar más rentable, llevandose sus fábricas, pero también sus ayudas.

Nos encontramos pues en un mundo en el que la caridad se ha convertido en poco más que un medio de marqueting que ayuda más a los ricos que a los pobres.

En estas páginas podeis leer artículos sobre el tema: http://www.entornointeligente.com/articulo-completo/1093520/Las-diversas-vias-de-la-responsabilidad-social  y  http://www.data-red.com/cgi-bin/articulos/ver.pl?id=200819221044

Aquí: http://www.gestionsocial.org/archivos/00000194/filantropiaempresarial.pdf  podeis leer un trabajo titulado Cuando las ONGs ayudan a vender helados que tambíen trata sobre este tema.

4 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo contigo en lo tocante al negocio que hacen las empresas con la caridad. Sin embargo difiero en que los ciudadadanos sean unas ´victimas´ sobornadas por las sociedades privadas: a mi modo de ver, son los ciudadanos quienes mantienen a las empresas y hacen posible esta muestra de hipocresía. El ciudadano puede contribuir a cambiar un poco el mundo pero es más fácil ver hacia otro lado...

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  2. En la publicidad, el tema de la responsabilidad social está de moda, pues hoy por hoy a sus consumidores “nosotros” les encanta comprar caprichitos que de paso ayuden a reparar el agujero de ozono, o le den de comer a un niño haitiano. Forma parte del cinismo "grandes almacenes" patente en esos anuncios de coches ecológicos o de CocaCola. Pero creo que el tema del desarrollo va mas allá del cinismo de las multinacionales, pues aunque es un factor importante, no es determinante y aunque el egoísmo suele estar latente en este proceso, a veces, por casualidades de la vida, un mal (las multinacionales) puede provocar el aleteo de la mariposa de las buenas intenciones y hacer que estos países puedan salir del subdesarrollo.

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  3. Estoy de acuedo en que nosotros deberiamos hacer más en contra de esa publicidad engañosa pero con dejar de comprar sus productos tampoco se harían más obras de caridad, sino que harían todavía menos. desde luego la cuestión no es fácil.

    Desde luego, aaunque estas ayudas sean interesadas esta claro que ayudan a las sociedades y que tal vez, en algunos casos, como dices, sea el detonante que les permita salir del círculo vicoso de la pobreza

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  4. La caridad esta bien: puede solucionar un problema puntual pero no uno de tanta envergadura como la pobreza que envuelve a gran parte del planeta. Creo que es mejor empezar a pagar a las gentes de los países pobres un sueldo digno, respetar sus derechos y comprar los productos a su verdadero precio.Quizás de este modo, algún día, estas regiones dejarán de ser aniquiladas y podrán desarrollarse adecuadamente.

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